Segundo post de Lisboa. Vino verde, gastronomía increíble, el mar, El Tajo, las vistas desde sus miradores, sus cuestas empinadas, paseos por Chiado...
Y ahora que estoy repasando creo que tendré que hacer un tercer post porque se quedan demasiadas cosas fuera... Se quedan fuera los pasteles de Belem, a Casa dos Bicos, mi querido Saramago, las azoteas viendo el atardecer, el puente 25 de Abril, a feira da ladra (un mercadillo de segunda mano), Alfama y Mouraria...
¿Algún enamorad@ de Lisboa?¿qué zona, barrio, lugar, tienda... recomiendas a todo el que allí se va?
Qué bonito...no he estado nunca y tengo muchas ganas! Oye la vajilla de lechuga me ha vuelto loca jaja Besos!!
ResponderEliminarSiiii, verás, te encantará :) A mi también, de hecho me compré cosillas así muy portuguesas, jeje.
EliminarMuuua!
¡Bonitas fotografías! Cuando fui a Lisboa pensé que no me iba a gustar tanto. Pero tiene algo mágico. Sus cuestas, sus colores, sus barrios... Espero volver, pero sobre todo, espero regresar con la misma compañía. Es eso realmente lo más especial de un viaje.
ResponderEliminarBesos.
Gracias guapa!
EliminarLa verdad es que enamora, pero tengo que reconocer que ahora que volví tampoco esperaba que me sorprendiese tanto y tan bien. Claro que sí, el viaje lo hace la compañía y las ganas que nosotros le pongamos.
Muuuua!
Sueño con ir a Lisboa. Me encanta esa ciudad, me la imagino vintage y llena de color y rincones donde perderse. Que suerte tienes de estar ahí!! Es una pena que no veamos lo cerquita que tenemos lugares tan inspiradores como este.
ResponderEliminarSiempre es un placer sentarse en este sofá para hablar y, sobretodo, para escuchar y leerte :)
Un besazo!
Primero, muchas gracias por tus palabras, para mi es un placer veros por aquí :)
EliminarLa verdad es que te la imaginas bastante cercana a lo que es, jejeje, tiene algo que la hace especial y es la mezcla de todo eso con el paso de los años desgastando todo y haciéndolo suyo.
Muuua!